Es hora de parar

Por Germánico Vaca

Las declaraciones de Silvia Buendía a la Posta representan un momento decisivo para la cultura ecuatoriana. Luego de la aprobación del matrimonio igualitario, según las declaraciones de Buendía representaba el inicio de una agenda global de buscar normalizar “a los niños trans género”.

La mayoría de la población no se han dado cuenta que existe una agenda global por parte de la elite mundial de “despoblación mundial” y que mejor manera que lograrlo si se convence a la gente que dejen de tener hijos voluntariamente con la agenda homosexual y transgénero.

La izquierda progresista y los medios de comunicación manejados precisamente por la elite mundial promueven que el respeto a los homosexuales y los derechos conferidos por cortes en varios países les hace beneficiarios para que la sociedad mantenga silencio. Al extremo de criminalizar hasta cualquier indicio de oposición como elemento de discriminación.

Es en realidad un intento de sacar provecho de años de historias cuidadosamente gestionadas sobre la "discriminación" de personas transgénero, ahora existe una campaña global generalmente exitosa del movimiento por los derechos de los homosexuales y activistas por lo que ellos interpretan es justicia social. Si bien ciertamente todo humano sin importar su religión, raza, edad e inclinación sexual tienen derecho a una vida digna. Nadie puede oponerse a ello. Pero eso no es la agenda completa. El objetivo es normalizar el transgenerismo hasta tal punto que no se tolerará ninguna crítica del concepto o sus practicantes. No se puede aceptar dicha premisa porque entonces el resto de la sociedad debe permitir cualquier transgresión, desviación y acto de corrupción para el beneficio de quienes vivan una vida degenerada.

La mayoría de los estadounidenses ya han sido doblegados sea que se hayan dado cuenta o no, el problema de las personas transgénero representa una guerra cultural. Han logrado hacer algo que nadie había logrado antes. Callar a la oposición completamente sea religiosamente, políticamente, legalmente.

Los progresistas están ganando. Hace veinte años una persona podía criticar abiertamente la homosexualidad. Hoy en día, gracias a varias cortes, las personas que no apoyan con entusiasmo el matrimonio igualitario son calificados de “intolerantes, descalificados, medievales, antiprogresistas” de hecho descartados como ignorantes cuyas opiniones están fuera del alcance del pensamiento súbitamente avanzado, aceptable y óptimo de los degenerados.

Los medios de comunicación sin duda alguna, ya han tomado partido y están calificando a las personas que se oponen al transgénero como "trans-fóbicos" por no aceptar la idea de que un hombre se haga castrar, se haga construir una vagina artificial y con senos postizos se declare “mujer”. Es algo verdaderamente degradante en contra de la belleza femenina, de la magnánima creación de la mujer. Ahora quienes se opongan están siendo tachados de "retrógrados, intolerantes".  

Los medios de comunicación en su mayoría no citan que el 41% de transgéneros cometen suicidio. Evitan hablar de los enormes costos médicos, no mencionan la creciente industria de cirujanos plásticos que se especializan a “fabricar” mujeres falsas. No existe mención alguna del enorme daño psicológico a esposas, ex esposas, hijos e hijas, padres de gente transgénero.  Al contrario, la prensa se ha convertido en la primera línea de defensa y las cortes les protegen. Existe enormes riesgos a la vida para quienes se someten a una cirugía de reasignación de sexo.

Lo que no puede caber duda es que existe una campaña sostenida de intimidación ideológica privada y legal hasta que los transgéneros sean aceptados como la nueva normalidad.

¿Por qué debemos luchar contra esto?

Sostengo que la legitimación del transgenerismo constituiría un cambio radical del mundo. No es más que la imposición de un sistema fascista contra las culturas. En realidad, es una contradicción a todos los principios que la humanidad ha luchado en los últimos siglos.

El Feminismo ha estado llevando a cabo una ardua lucha por la igualdad de sus derechos. Las minorías luchando contra discriminación racial. El transgenerismo es una contradicción absoluta. Es literalmente luchar por lo falso, lo corrupto y la degeneración.

Toda mujer ha sido educada a través de siglos bajo ciertos principios, valores morales y patrones de comportamiento porque es la mujer quien sostiene los principios y valores de la familia. Es la preparación evolutiva para ser madre y para educar a sus hijos, con el firme propósito que la sociedad mantenga esos estándares y valores morales en la que se basa la sociedad y la cultura. Pero se pretende imponer un fascismo de doble pensamiento. El transgenerismo pretende que un hombre con maquillaje y par de operaciones pueda suplantar a la mujer.

Si un vecino suyo se queja que usted tiene un perro que ladra y fastidia y demanda que haga algo al respecto, Ud. no puede prestar como solución vestirle al perro de gato y decir que ahora su perro es gato porque le ha vestido de gato.

Si usted va a un zoológico no le pueden pintar a un caballo con líneas y decirle que es la exhibición de una cebra. No sería más que un fraude.

No sería lógico que alguien le pinte a un oso negro con pintas blancas y le exhiban como un oso panda. Ni tampoco le pueden dar carne de codorniz y decirle que es pollo.

No existe absolutamente nada de diferencia a lo que es un transgénero, aun si le dicen, que el equivocado es usted, porque el dueño del oso tiene el privilegio de saber que el oso piensa que él es un oso panda. O quien le vende la codorniz le diga que el piensa que era pollo.

El mismo concepto es literalmente una falsedad. Prácticamente se le pide a la mayoría de la sociedad a creer en “la fantasía o la enfermedad mental” de cualquier individuo. No sostengo que debamos perseguir u odiar a las personas transgénero. Todas las personas tienen el derecho de elegir vestirse como ellos quieran o disfrazarse de lo que a cada quien le plazca. Al igual que tienen todo el derecho de asociarse libremente con otras personas que disfrutan de sus delirios. Lo que necesitamos proteger es nuestro derecho a desaprobar su comportamiento y rechazar su "ciencia". Debemos esforzarnos y luchar.

¿Acaso si yo decido disfrazarme de reptiliano o de vampiro tengo derecho a ir por el mundo clamando respeto de la sociedad como reptiliano o vampiro? ¿Acaso una corte va a aprobar que ese es mi derecho y la obligación de todos aceptar mi psicopatía?

La sociedad se basa en el respeto del bien común de todos los miembros de la sociedad. No se puede permitir la invasión del espacio y la privacidad y peor la educación de nuestros hijos bajo conceptos falsos.

Si bien en Estados Unidos los progresistas han logrado pasar dichas leyes en gran parte gracias a la indiferencia, cobardía moral y desconcierto de los norteamericanos que viven con el lema de ser antipolíticos. Ahora los transgénero se sienten fortalecidos por la tendencia de la sociedad en general a no tomarlos en serio, a decir "¡A quién le importa unos pocos locos",

La lucha por los derechos humanos, los derechos de las minorías y los derechos de las mujeres no ha sido fácil y tomaron décadas para obtener logros justos. La historia de las varias causas de derechos civiles anteriores es muy larga para enumerarla. Las campañas progresivas anteriores relacionadas con temas tales como la liberación de la mujer, los derechos de los homosexuales, discriminación racial y religiosa tenían justificaciones libertarias decentes y no buscaban imponer sobre la sociedad más que un tratamiento y una vida digna y justa. La misma lucha de los homosexuales ha sido en realidad pedir la tolerancia. Pero el matrimonio igualitario y el transgenerismo, por el contrario, imponen sobre la sociedad su comportamiento.

La sociedad se verá obligada a cambiar cuestiones de segregación sexual, en todas partes, desde las escuelas hasta las ligas deportivas, competencias de atletismo y los baños. Tomando en cuenta que todo esto se exige en función del concepto de "género", ya que las personas transgéneras han dejado de usar el término "transexual". Según ellos la tecnología actual permite que el sexo sea inmutable. Dado que el género sin más ha cambiado de definición y concepto. Históricamente el género era la raíz de hombre y mujer, por la obvia razón que la existencia humana misma depende de la “generación y la regeneración” y lo opuesto a ello es la “DEGENERACION”. Pero ahora los transgéneros han reconfigurado todo ya que ahora “genero” supuestamente se trata de “sentimientos definidos” en lugar de biología, la lógica transgénero permitiría a cualquier hombre afirmar que es una mujer y entrar en el vestuario de mujeres. Ignorando la biología y aspecto físico de hombre, existencia de pene y todo lo que conlleva al género masculino. Según los transgéneros solo hace falta que la persona se “defina sintiéndose mujer” para clamarse mujer. No hay ningún requisito alguno para que alguien ahora se haga pasar por “mujer”, ni hay un requisito de que su "sentimiento" sea permanente.

Existe un problema y un grave peligro que todo esto va a erosionar nuestros derechos, es un atentado a nuestras propias mentes y nuestras percepciones de la realidad. Un hombre no puede ser aceptado como “mujer” simplemente porque él cree que lo es. Tal como usted no aceptará que el carnicero le entregue carne de rata y le diga que acepte que es pollo. Sin embargo, los progresistas quieren que aceptemos que creamos lo mismo o que nos atengamos al dolor del ostracismo social, la pérdida de empleos y las demandas por discriminación. Si otorgamos a los progresistas el derecho a redefinir la realidad. Muy pronto entonces otros pervertidos y dementes nos dirá que la pedofilia y los pederastas están en su pleno derecho.  No tendremos argumentos entonces contra la poligamia, la pedofilia, la zoofilia o cualquier rango de comportamientos inaceptables actualmente. Todo será cuestión de percepción.

Así en el mundo absurdo de los transgéneros si un burro se siente cebra, cualquier zoológico simplemente puede conseguir un burro y pintarle con líneas y exhibirle como cebra y pobre de aquel incauto que le llame burro, aquel individuo tendrá que atenerse a demandas de discriminación, multas y sanciones si define la realidad bajo su capacidad mental y desconociendo la realidad mental del burro.

No existe explicación alguna como los supuestos jueces que han aprobado estas leyes pretenden que el resto de la humanidad acepte los criterios legales que definen que para la identidad de una cosa es suficiente “las meras creencias de parte del sujeto”.

 ¿Por qué no se le debería permitir a un niño tener una relación romántica con un adulto si él niño también cree que es un adulto?

 ¿Desde qué edad entonces son los niños capaces de decidir ser adultos listos para tener sexo?

Y es que ahora los transgénero pretenden hacer que la sociedad acepte que los niños decidan vestirse de hombres y mujeres y sin importar si están confundidos o no puedan tomar hormonas para cambiar lo que son.  Seguramente no se podrá argumentar que un niño pequeño no debería tomar hormonas y cambiar su género (una decisión que tendrá un impacto masivo en el resto de sus vidas), y entonces como prohibir que consienta el sexo. Si los sentimientos son lo suficientemente buenos en un caso, ¿por qué no en el otro? No solo estamos legitimando una subcultura de perversión sin nombre que invitará a una sociedad de perdición absoluta. Lo triste es que se está estableciendo todo esto bajo un criterio de falsedad, carencia de estudios científicos y se pretende legalizar y legitimar algo tan irracional y peligroso como para garantizar una cola interminable de subculturas adicionales que se presentarán buscando lo mismo. Afirmación de la sociedad.

La mujer es una divina creación con la capacidad única de ser madres. La mujer es irreemplazable e inigualable. Si tenemos una madre y hemos amado a una mujer entonces no podemos aceptar un hombre después de un poco de cirugía y maquillaje se pueda declarar “mujer”. No solamente es degradante para la idea de la condición de mujer. No es aceptable que un blanco pueda clamar ser negro porque "siente" que es. Ni tampoco un indio puede clamarse escandinavo porque así sienta que es.

Al carecer de la biología y el trato diferente de la sociedad que proviene de ser realmente una mujer, no se puede aceptar que por solamente una afirmación de que "siempre se ha sentido como una mujer" la sociedad entera deba entonces aceptar “la obvia mentira” como algo real. En el caso de un niño “transexual” lo que realmente siente es el deseo compulsivo de jugar a disfrazarse de mujer. La manifestación fetichista de feminidad producido por sus propias inseguridades psicológicas, el máximo narcisismo y una presunción de "las mujeres son siempre más mimadas" les hace querer vivir como mujeres. Las personas transgéneras sufren de una enfermedad mental generalizada y, como resultado, merecen nuestra compasión. No hay razón para ser violentos o malvados hacia ellos. Aun así, no se debe esperar que afirmemos sus neurosis más de lo que deberíamos afirmar las creencias de un esquizofrénico que se cree un extraterrestre.

Ya basta de aceptar las agendas globalistas. El tiempo para vivir manipulados como masas de ignorantes ha terminado, debemos despertar a la realidad que este mundo es nuestro y podemos demandar exactamente lo mismo que piden los transexuales, respeto a nuestra forma de vida, nuestra cultura, nuestra sociedad y la mayoría debe ser respetada o pocos van a destruir hasta la capacidad de razonamiento. No me voy a disculpar, a lo largo de mi infancia se burlaron de mi porque era demasiado blanco: hijo del lechero, plátano mosqueado, hecho con la sabana. Supe superar los insultos sin falta de psicólogo, sin falta de pedir que la sociedad cambié por mí y aprendí a ser valiente y enfrentar problemas, Todos lo hacemos ante discriminación racial, religiosa, clase social, condición económica, tamaño o capacidad atlética.  No tenemos que pedir perdón ni disculpas a nadie. Este ruidoso .001% de la población está enferma y no se debe permitir que dicte la vida de los demás. Cuando algún hombre transgénero te diga que te muevas a un lado porque es mujer, párate firme y dile. “Yo soy el árbol de la verdad y no puedo moverme”. 

Las Tabletas de THOTH pronosticaron esto. Aquí la parte que menciona que enfrentaremos esto

Hombre, vosotros pensáis que es vivir,

Solo sentir el placer carnal antes de que os llegue la muerte

Cuando tienes las llaves dentro de ti

A crear un mundo de ideas y a vuestro propio modo

Y es que no hay escuela ni Universidad que pueda enseñarte

La magia interna de crear, inventar y alcanzar la luz

Tan seguro que estáis atados a vuestro cuerpo,

Tan confundidos los pobres niños y jóvenes manipulados

Por los seres del mal y de la oscuridad que quieren implantarte

Doctrinas de defender solo el sexo y el placer carnal

Cuando para ti no existe vida si te alejas de la luz.

Sólo el alma es libre de espacio,

Tienes vida que es realmente una vida.

Todo lo demás es sólo una servidumbre,