DEJA VU

 

DEJA VU Ecuador

Por Germánico P Vaca

Ecuador está viviendo un evento de DEJA VU.

Lo que Ecuador está viviendo ya lo vivió el siglo pasado. En la década de 1960 la CIA inició una serie de actividades en Ecuador para doblegar a la nación Sur Americana y hacerle vivir una distopia total. Una anarquía que le obligó a vender sus recursos al precio más bajo posible. Ahora eso es exactamente lo que está sucediendo y tanto el gobierno de Lasso, como la manipulada oposición son dos partes del mismo cáncer y el mismo objetivo.

Tal como había predicho en el año  2007 en mi obra “Conspiración en Latinoamérica” el plan de la elite es siempre a largo plazo, y luego de diez años de construir la infraestructura se venía el ajuste de las deudas y préstamos para que las mismas multinacionales que lucraron obteniendo contratos a dedo y haciendo las obras por cinco veces y más el costo real del mercado internacional, entonces la nueva marioneta vendería todo a un minúsculo precio. Cualquiera haya sido la razón que postergaron el plan, ahora enfrentamos precisamente esa realidad. Todo está sucediendo exacto como sucedió en los sesentas.

Es precisamente en ese entonces que la CIA inicia sus actividades en Ecuador para involucrarse e infiltrase con otras organizaciones verdaderamente izquierdistas y comunistas en todo Latinoamérica. Así, la CIA a menudo adquiría nombres de todas las organizaciones izquierdistas, comunistas y simpatizantes de estas en todo el continente. Al extremo que eventualmente terminó formando grupos que y organizaciones indígenas que existen hasta hoy día.

Fue precisamente en Ecuador donde se podía verificar cualquier dato y organización que realice actividades con Cuba. La CIA podía controlar las acciones de las organizaciones izquierdistas, porque desde entonces han mantenido a sus líderes en su payroll” y para este fin, organizaban eventos laborales y congresos o conferencias internacionales en Ecuador. Aunque los participantes nunca estén informados del verdadero propósito de dichos eventos y sean brillantemente ignorantes del verdadero objetivo, sin que se enteren quien es quien y el porqué de todo esto, asistían a los eventos en Ecuador.

Caso similar con el Congreso Bolivariano. (Nótese que en el año 2004 descubrí que los sitios webs de varias organizaciones indígenas estaban registrados a nada menos que a agentes de instituciones de inteligencia, usted podía entonces chequear quienes eran en realidad los dueños o quienes registraban y mantenían ciertos sitios web de organizaciones supuestamente de la comunidad ecuatoriana. Otro acto impresionante es que muchos comunistas y socialistas peruanos, argentinos y venezolanos quienes participaban en el Congreso Bolivariano, jamás ni se percataron que, gracias a haber atendido dichos eventos en Ecuador, la CIA mantenía sus tiene nombres en la lista de gente que requiere posible atención.  

Es precisamente en la década de los 60 que la CIA también inició el proceso de apoderarse de varios periódicos en Latinoamérica, de estaciones de radio y hasta su propia agencia de noticias en Latinoamérica.  Desde entonces la CIA ha mantenido periodistas que reparten noticias de acuerdo a los intereses de la CIA y al mismo tiempo que controlan la desinformación, conducen a crear la atmósfera y el sentimiento de la población con respecto a ciertos individuos.

Esto es sumamente importante para entender cómo Rafael Correa saltó de la nada a la fama de inmediato y ganó notoriedad de Ecuador y del mundo por haber servido de ministro de Economía por poco más de tres meses. Categóricamente me atrevo a decir que si fuese a escribir una novela de ficción y dijese que un personaje llega a ser presidente gracias a su trabajo de tres meses como ministro de economía, no creo sinceramente que nadie pensaría que es una trama muy creíble. Pero he ahí, algunos ecuatorianos creen que el carisma de Correa es el responsable para que haya obtenido el poder. Simplemente, tal cosa es imposible sin el aparato de desinformación de la CIA.

En 1960, cada departamento del gobierno ecuatoriano estaba prácticamente infiltrado por gente que cooperaban con la CIA, sea por dinero o por sus propios intereses personales. Al punto que la CIA logró poner su propio personal en la Presidencia y Vicepresidencia del país.

Ahora que ha iniciado el proceso de apoderarse de las minas, para la explotación del oro, la plata, cobre y demás recursos la CIA ha iniciado un nuevo capítulo de intervención. Esa es la razón que un indígena como Leónidas Iza puede conseguir una reunión con el presidente Guillermo Lasso.

Esto deben sentir el deja vu pues precisamente en los años de 1960, la empresa de Texaco quería que Carlos Julio Arosemena les entregue las concesiones de explotación del petróleo ecuatoriano por la cantidad de 3 centavos de dólar por treinta años. Arosemena Monroy había rehusado hacerlo a pesar de las amenazas de los Estados Unidos. Para lograr hacerlo la CIA inició un proceso de destrucción de la sociedad para doblegar a Ecuador, para eso necesitan que el país este distraído y bajo una total anarquía para que acepten el más misero pago por regalías y con suerte con liberación absoluta de impuestos para todas las empresas extranjeras, mientras subirán los impuestos a los ciudadanos.

Un claro ejemplo de esto fue que para 1968 las concesiones petroleras y mineras fueron otorgadas por Otto Arosemena Gómez, quien había sido puesto por la CIA para ese propósito, a pesar de que Otto Arosemena clamaba estar mas bien opuesto a los Estados Unidos, mientras aceptó un pago tan minúsculo por el petróleo. Otto Arosemena Gómez fue puesto específicamente para eso por la CIA de acuerdo a documentos desclasificados de los USA.

La CIA al igual que ahora precisamente usaba la tecnología para obtener beneficios a través de interceptar teléfonos, equipos especializados de audífono, grabaciones secretas etc., ahora utilizan Facebook, Whatsapp y otras redes sociales para obtener dicha información en muchos casos ganando dinero. En aquel entonces dicha información compartía con sus agentes permitiendo que dicho personal gane prestigio y promociones, consolidando así el completo control de la política ecuatoriana. Ahora que existen oficinas de la NSA en Ecuador, se puede decir que tácitamente toda llamada telefónica en el país está siendo escuchada por la NSA.

Es precisamente las experiencias claramente detalladas por el agente Philip Agee que nos demuestran que Correa no pudo haber sido más que un agente de los intereses de la elite mundial, porque precisamente la CIA prácticamente no estuvo activa en causarle oposición mayor, porque estaba siguiendo su plan y era su títere.

De esa forma cuando cualquier ministro, militar u oficial del gobierno de alto rango aceptaba seguir la política que Correa demandaba seguir, de lo contrario esa persona se volvía el blanco de propaganda negativa de todo el aparato de noticias, radio, televisión, prensa y de los grupos tanto de izquierda y derecha que estaban infiltrados en el país. De esa forma, se ejercía tremenda presión contra esa persona o se obligaba al presidente a destituirle del cargo. Muy claramente el gobierno de Correa se caracteriza por prácticamente haber eliminado mágicamente toda la oposición. La prensa real ecuatoriana apenas presenta una mínima oposición a Correa. Cuando no lo hicieron, rápidamente fueron silenciados pasando enormes sanciones económicas contra ellos. Estados Unidos ha sido extremadamente cauteloso, paciente y de hecho en la forma más extraña que haya visto, la Embajada norteamericana, el Departamento de Estado y el mismo presidente Bush, jamás han hecho declaraciones en contra de Correa a pesar de serias acusaciones de Correa. ¿A qué obedece ese cambio radical? Nuevamente el libro de Agee nos lo demuestra cuando habla de Julio Arosemena Monroy y Otto Arosemena.

De acuerdo al libro de Agee, el director de Correos Nacionales, además de varios empleados, también recibían un sueldo de la CIA, de esta manera el correo podía ser interceptado, leído, analizado, y la información controlada por la CIA. Igualmente, el director de inmigración y aduanas mantenían a la CIA informada de cualquier entrada de armas o personal de interés a la CIA. En algunos casos, se usaba esos medios para implantar evidencia contra cualquier persona que no sea de agrado de la CIA y así se le “encontraban” documentos que atentaban contra la seguridad del país, contra el partido al que pertenecían, o contra el mismo cargo que ocupaban. La misma radio y prensa controlada por la CIA rápidamente informaban al país del arresto de cualquier persona no grata a la CIA y poco o nada tenía que ver los verdaderos intereses del país.

Es extremadamente extraño como muchas características del gobierno de Rafael Correa semejaban escenarios de operaciones clandestinas y obviamente planificadas al modus operandi de la Agencia Central de Inteligencia. Ahora se está viviendo eventos similares. Se necesita ser bastante ingenuo para creer que toda esta conmoción social y esta división es producto de manipulación. Esta nueva clase de comunistas, izquierdistas y gente con tendencias guerrilleras están supuestamente en la dirección de los indígenas y al mismo tiempo los Latin Kings causan todo tipo de problemas en las cárceles y el partido del ex tirano Correa súbitamente es capaz de manipular un posible juicio político contra Guillermo Lasso, cuando sus miembros son extremadamente estúpidos. Pero nos quieren hacer creer que son parte de todo un complot muy bien manejado por el bisexual narciso, quien viaja por todo el mundo a reuniones con nada menos que el genocida Nicolás Maduro y la certificada ladrona argentina Fernández.

En otro ejemplo de cómo la CIA mantuvo al Ecuador sumido al caos y controlando sus gobiernos hace décadas, en el gobierno de Velasco Ibarra, habían contratado los servicios del médico personal de Velasco el Doctor Felipe Ovalle. De esta manera, la CIA sabía cada dolor que sufría el presidente y le prescribía cualquier medicina que pueda aún alterar o calmar los nervios del Presidente.

Quizás es una de las revelaciones más interesantes de Agee en su libro es los relatos que son parte de los recuerdos de infancia y juventud de muchos ecuatorianos, presumo que mucha gente se identificaría con sus propias experiencias. Para mí sin duda es así y esas experiencias constan en mi novela “El Laberinto de la Vida”.

Agee cuenta las experiencias que parecen ser el inicio del desencanto con la CIA. En 1960, agentes de la CIA, incluyendo Agee, participaron en bombardear iglesias, organizaciones de derecha para involucrar a la iglesia católica y aparentar que las fuerzas izquierdistas estaban provocando una guerra entre las clases. En realidad, siempre eran agentes agitadores infiltrados. Tal como sucede ahora con las huelgas y paros de Pachakutik y la Conaie. Al mismo tiempo, participaban en marchas de izquierda con pancartas y eslóganes insultando a las fuerzas armadas para crear el antagonismo anti militar y evitar un golpe de estado. Esa forma de operar para desinformar es demasiado similar a toda la mediática de Correa en contra de los pelucones, en contra de Estados Unidos y en contra de los partidos de derecha.

Algo que siempre pasó desapercibido por la prensa ecuatoriana es que, mientras Rafael Correa vapuleaba al imperio y hasta contra Bush y Obama. Extrañamente las universidades de Columbia, Yale y Harvard, incidentemente las creadoras del proyecto Camelot aka Socialismo XXI le parodiaban y le hacían dar discursos en dichas universidades, a pesar que el inglés de Rafael Correa que era imposible que pudiese aprobar el TOEFL: test, peor ganarse un doctorado en economía de Urbana University, pero la CIA siempre está presta a conferir títulos falsos mientras sus marionetas están dispuestas a bailar el tango de Uncle Sam. Igualmente, Correa ha acusado a las fuerzas armadas de estar infiltradas por la CIA. El propósito es crear la desconfianza del pueblo en las fuerzas armadas para que estas no puedan intentar siquiera un golpe de estado en defensa del verdadero estado de derecho ecuatoriano. Pero el mismo Assange expuso leaks de las comunicaciones de la embajadora Hodges que demostraba que Correa era comunicado todo con anticipación lo que estaba haciendo la embajada. al revisar la historia es demasiado evidente qué intereses representa Correa.

Es notable que en 1960 Velasco Ibarra estaba consciente de las acciones de la CIA y de la situación del país, y de hecho, Velasco hizo arrestar a dos agentes de la policía que servían intereses de la CIA y pidió que el jefe de la agencia en el Ecuador en ese tiempo Bob Weathermax salga del país. En el caso de Correa la embajadora norteamericana le había notificado que el encargado de asuntos de espionaje de la embajada había regresado a los USA. Correa clamó que era nada menos él quien le había mandado sacando.

Otra notable información en el libro de Agee es que, el embajador norteamericano no era informado de las actividades de la CIA. De acuerdo a Agee, el embajador realmente creía sus palabras, aunque estas causaron carcajadas a los varios agentes de la CIA en el país. El embajador había dicho, “Los únicos agentes que son pagados por Estados Unidos son los técnicos invitados por el gobierno norteamericano para contribuir al incremento del estándar de vida de los ecuatorianos”.

En noviembre de 1961, después de varios meses complicados de gobierno y supuestos intentos de golpe de estado que solo tenían el propósito de preparar al pueblo para esa eventualidad, Velasco Ibarra fue obligado a abandonar el país y fue reemplazado por Carlos Julio Arosemena Monroy. Aunque la Cámara del Congreso había querido elegir al Rector de la Universidad Central de Quito, la CIA de inmediato había creado la noticia de que sus principales partidarios eran el partido comunista de Ecuador y un grupo izquierdista juvenil.  La noticia había sido difundida por un columnista de prestigio en el principal diario del país. Con ello la CIA había asegurado que su hombre gane la presidencia.  Arosemena, sin embargo, había sido un desastre para la CIA y en una muestra de honor patriótico, había recibido al nuevo embajador de Estados Unidos en la playa y en terno de baño. Para colmo de la osadía le había preguntado al embajador “si deseaba la compañía de boys or girls”. Al mismo tiempo, había rehusado obedecer las órdenes de la CIA a pesar de una constante amenaza de golpes de estado. Entre el caos político y económico, el pueblo ecuatoriano desesperado había finalmente tomado las calles en protestas multitudinarias, con armas que no eran más que piedras y palos. En su mayoría grupos estudiantiles de la Universidad, del Colegio Mejía de Quito y sindicatos de chóferes conjuntamente con algunas agrupaciones de izquierda, pero la CIA sabía cada uno de sus movimientos pues estaban totalmente infiltrados y se enfrentaron a los batallones mejor entrenados por Estados Unidos. Sin embargo, la prensa reportó que un atentado de elementos armados por Cuba había intentado dar un golpe de estado; responsabilizando al partido comunista del intento golpista y atentado contra la democracia ecuatoriana. La junta militar tomó control del gobierno, declaró ley marcial en el país, arrestaron cientos de izquierdistas y comunistas que la CIA había recopilado en datos de años de operaciones. Una vez que las libertades civiles fueron eliminadas se suspendió las elecciones de 1964.

Los eventos del pasado se repiten en el presente. Ecuador está viviendo el fruto de operaciones clandestinas de la CIA en forma idéntica como Agee describe, que en 1965 la Agencia de Desarrollo había tomado control absoluto de la Confederación Campesina de Chile para controlar todas sus acciones.  Entonces, la CIA había logrado infiltrar las varias organizaciones izquierdistas, campesinas y laborales tanto en Chile como en Ecuador. La CONAIE y Pachakutik obedece las ordenes de la CIA y las pretensiones de Lasso de negociar con ellos es lo único que les da y certifica como una organización poderosa. En la realidad es una violación de la constitución pues pretende atender privilegios que demanda un 10% de la población ecuatoriana y permite que su gobierno sea manipulado y secuestrado por las acciones de un agitador pagado y controlado por la CIA. Tal cual como ahora sucede y se puede confirmar.

Es casi imposible que las organizaciones indígenas de Ecuador no estén infiltradas. Un claro indicio son los sitios en la red global de Internet donde las organizaciones indígenas exhiben tremenda información en varios lenguajes y con todo tipo de detalles, de cada actividad, reunión, personas involucradas, es tan detallado que avisan cada paso que van a dar, incluyen detalles hasta de reuniones y llamadas telefónicas. Toda actividad y acción política o económica del país en perfecto inglés, en español y en quechua. Todo eso toma dinero y nadie lo hace gratis. Pero reciben sus sueldos por intermedio de USAID.

 Acaso se pasa por alto que no existe un quechua/quichua estándar, hay tantos dialectos quechua/quichua que en Imbabura el Kiwa no se parece al quechua de los Otavalo, tampoco es el mismo de los Saraguros, ni siquiera de las otras etnias de Imbabura peor de otras regiones de Ecuador. Igualmente, las tribus del oriente como los Huaoranis, Cofanes, Sachas hablan otras lenguas. Pero los ecuatorianos están supuestos a creer que los Achuar, y todas esas tribus son multilenguaje. Todo esto cuando solamente el 5% de los indígenas en Ecuador tienen computadores y menos todavía tienen acceso al Internet, más del 70% carece de educación formal y se han graduado de la secundaria. Pero en su afán de desinformar, se vende la idea de que toda dicha información en esos sitios webs es para mantener a las etnias indígenas informadas.

Todo esto sirve para justificar y vender la idea al mundo que los grupos indígenas son poderosos políticamente, aunque están infiltrados y están siendo manipulados en la forma exacta que describe Agee y que por eso los mantienen divididos en sus diferentes agrupaciones, en su fórmula constante de dividir y conquistar.

Sin duda estoy orgulloso y reconozco la labor de muchos indígenas ecuatorianos, pero basta ver la información en los sitios web para darse cuenta que dicha información está creada para consumo exterior no para los indígenas del país.

Existe un interrogante interesante, ¿Cómo es que el sitio de Internet y toda la información de todos los grupos indígenas más poderosos del país y los movimientos indígenas: CONAIE, Pachakutik, Ecuarunari, Fedecin inclusive de Dolores Cahuango eran de propiedad de Marc Becker? Luego de mi denuncia en el año 2007 fueron cambiadas a anónimo hostess registration. Al menos estaban registradas, y administradas por un profesor de Truman University. (Harry Truman fue quien autorizó la creación de la CIA).  Pero no solamente eso, los websites afiliados a la misma persona contienen la información histórica súper detallada del socialismo y comunismo en Ecuador, eventos históricos y nombres de cada agrupación indígena. Increíblemente, en todos esos documentos no existe una sola referencia del intervencionismo de la CIA en Ecuador, de las infiltraciones de los grupos sociales y comunistas. Es extraño que la documentación con respecto a la historia de cada socialista y comunista en Ecuador se encuentre en los otros sitios web de propiedad de la misma persona. Categóricamente, una cantidad de sitios webs de las agrupaciones indígenas eran de propiedad de Marc Becker. Debo aclarar que no acuso que dicha persona sea de la CIA, pero sinceramente encuentro muy sospechosa la información. Obedece solamente al interés de informar u obedecen a otros intereses. Una cosa no puede ser negada, la CIA necesitaría solamente contactarse con el profesor Becker para saber quién es quién en los movimientos indígenas de Ecuador porque él tiene toda la información.

Una cosa notable es que en todos esos años de la década 60, Ecuador pasó desapercibido para la prensa mundial y no existían artículos de la prensa en el New York Times o en el Washington Post. No existía una sola mención de operación alguna de la CIA en Ecuador en todo este tiempo.

Pero cuando Rafael Correa asomó en la escena la diferencia fue marcada, como nunca antes un presidente ecuatoriano recibió amplia cobertura internacional. En la ausencia de Castro, los caballos de Troya rebuznaban turnándose en sus anuncios de pedir cosas tan utópicas que nunca se podían realizar por ser extremos, como la ley de Correa del 99%-1%. A nadie con dos células de inteligencia en el cerebro le puede caber en la mente que un país pueda percibir el 99% de las ganancias y el 1% a la compañía petrolera. Por obvias razones, pues si el impuesto a los recursos es 15%, si las regalías son otro 15% y no hay compañía en el mundo que pueda operar si no hay un diferencial de al menos el 30% para ganancia de los inversionistas, 30% para gastos de operación, administración, salarios etc., 30% para costos de impuestos, y un 10 % para otros gastos como gastos legales, investigaciones, etc. Así, el supuesto 99% a 1% ni siquiera tienen sentido y es una simple “propaganda flotante de Correa”. Mientras tanto Rafael Correa siempre avanzó los planes globalistas y regionales del Nuevo Orden Mundial como Banco Sur, Moneda Sur Americana, UNASUR etc. Todas ideas y p-propuestas por George Soros quien es parte esencial de la distopia mundial. Por supuesto nadie apuntaba a esta triste realidad porque la prensa en controlada. Tal como a diario se leían reportes, propuestas, mandatos, expropiaciones de tierras, acusaciones, insultos de uno de los números 66: Rafael Chávez, o Rafael Correa. Sin embargo, al ver detalladamente sus acciones ahora la CIA ya está ajustando las cuentas y al igual que otro de sus agentes, Manuel Antonio Noriega quien cuando pasó su tiempo de utilidad fue a terminar en una cárcel de los United States, ahora Maduro, Correa y demás siervos de Satanás ya tienen su celda reservada en una prisión norteamericana. Porque ahora la CIA está muy concentrada en apoderarse de todos los recursos, el oro, la plata, los diamantes, el petróleo y cuanto recurso exista para beneficiar a Tio Sam. Tristemente la gente rehúsa entender que los $300 mil millones que se gastan las agencias del espionaje es para conducir estas operacio0nes que hacen de las vidas de los ecuatorianos y venezolanos una aventura, mientras por atrás sus aclamados líderes están entregando y regalando la riqueza de las naciones de Ecuador y Venezuela.

Ahora muchos ingenuos argumentarán que los Estados Unidos siendo una potencia mundial no necesita hacer eso y mucho menos con un gobierno amigo como el de Guillermo Lasso. Pero eso es como funciona el imperio y la hegemonía. Una manera de entenderlo es la forma que el padre de Donald Trump hizo su fortuna. Precisamente en la misma década, cuando Fred Trump ponía sus ojos sobre una posible inversión entonces concertaba acuerdos con los alcaldes de turno para obtener beneficios de liberación total de impuestos, mientras en acuerdos con la mafia judía y rusa incrementaban en cantidad el robo y crímenes en la zona de inversión hasta el punto que manejaban los precios al piso, hasta cuando era ideal para Fred Trump comprar y demoler las casas viejas o comprar los terrenos a precio extremadamente baratos. Para cuando Fred Trump los adquiría costaban menos del 50% de su valor. Luego Trump construía con bonos y financiamiento del gobierno municipal de Nueva York y vendía sus casas con todo tipo de programas del gobierno que le pagaban a precio completo. Básicamente eso se está haciendo en Ecuador. El crimen imperante es terrible, los precios están por los suelos, el gobierno desesperado por dinero está dispuesto a darle las minas de oro, plata y cobre sin impuestos algunos y por apenas 3% a 8% de regalías. Es literalmente regalarlo por nada, pero eso es el plan de Guillermo Lasso. Mientras que la CIA trabaja arduamente con sus agentes de desestabilización Yaku, Iza y demás organizaciones que bajo el pretexto de “oposición” están conduciendo al país a una situación de total anarquía. Todo hasta llevarlos a la perfecta distopia y cuando se firmen los contratos de concesiones mineras y de petróleo donde se pueda explotar cinco veces lo que se saca de minerales y el doble de lo que se extrae de petróleo como por arte de magia todo mundo estará feliz y volverá la calma. Uncle Sam entonces estará feliz sacando y explotando todo y dejándoles toda la polución, basura, desperdicio y llevándose todo su patrimonio de riqueza.

La evidencia aquí presentada es otro indicio para sospechar que Guillermo Lasso, al igual que Lenin Moreno y Rafael Correa simplemente sirven otros intereses menos los de Ecuador, porque a pesar de la mediática bastante ofensiva de Correa hacia Estados Unidos, en su mayor parte la embajada, el Departamento de Estado, Condoleeza Rice y el mismo George Bush apenas se pronunciaron acerca de Correa. Mucho menos ha habido acciones de la CIA en contra de Correa, pues como demuestra esta evidencia es la CIA quien mueve los grupos indígenas a tomar acciones y llevar a cabo manifestaciones; es la CIA quien financia las protestas de trabajadores; es la CIA quien manipula la prensa y la oposición; es la CIA quien tiene infiltrado y controlado el aparato político. Después de todo, si tienen control absoluto del caballo de Troya, no hacía falta hacer mucho contra él. Ahora a Guillermo Lasso le tienen prácticamente bien agarrado sus huevos, porque Lasso tiene un préstamo de $122 millones para el banco de Guayaquil del gobierno americano. Si no canta al ritmo del tio Sam encontrarán la forma de dejarle sin banco. 

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